ALCAZAREÑOS POR EL MUNDO

¡Nuevo capítulo de nuestra nueva sección! Cuyo objetivo es dar visibilidad, a los jugadores y jugadoras formados en la cantera del CD Alcázar que continuan disfrutando del baloncesto en diferentes partes del planeta. ¡En esta ocasión nos vamos a Granada! Donde disfrutaremos en esta ocasión de un extraordinario 'mano a mano' entre dos almas gemelas: Irene y Laia Perelló.

Habéis lucido la camiseta del CD Alcázar, prácticamente desde los 5 años; ¿qué es para vosotras Alcázar? ¿Qué recuerdos tenéis de vuestro (¡extraordinario!) paso por el club?

Irene: Para mí el CD Alcázar siempre ha sido un refugio, un lugar donde he podido evadirme de todo y disfrutar del deporte que más quiero. Ahora que estoy en Granada, lo recuerdo como un lugar al que siempre quiero volver, y que visito siempre que puedo para así recordar los buenos momentos: las innumerables duchas con la música a tope ¡y sin parar de reír!, todo lo disfrutado junto a mi extraordinario equipo, los siete campeonatos de Baleares, y la (¡gran!) experiencia de vivir un Campeonato de España, entre otros muchos.

Laia: Para mí el CD Alcázar es más que una familia. Es mi otra casa, donde además de aprender muchísimo baloncesto, también me inculcaron una serie de valores para crecer y mejorar como persona. Los recuerdos como dice Irene, son incontables: distintos torneos, comidas familiares, los siete campeonatos de Baleares (ganando el último, lo que nos permitió disfrutar de la genial experiencia de disputar un Campeonato de España), etc. Todo ello, sin olvidarme de los grandes entrenadores que han pasado por mi vida, y a los que tengo tanto que agradecer.

Un amor por el baloncesto en el que os educó uno de los entrenadores más importantes de la historia de nuestro club. ¿Qué/Cuánto hay de Toni Perelló, en cada una de vosotras dos?

L: Mi padre para mí siempre ha sido un ejemplo a seguir, no solamente en el ámbito deportivo sino también en el personal. De pequeña siempre me encantaba ir a ver sus partidos y ver como sus jugadores se lo pasaban igual de bien que él. A día de hoy me doy cuenta lo mucho que agradezco que haya sido mi padre y que me aficionara al baloncesto. Siempre mi familia me ha dicho que era una loca por el baloncesto como él y no decían mentidas. He heredado sus ganas de enseñar a los niños sus valores como jugadores de baloncesto pero también como personas y a día de hoy puedo decir que estoy cumpliendo mi sueño de poder ser una mini entrenadora Perelló y creo que él estaría muy orgulloso del trabajo que hay detrás.

I: Mi padre es mi gran referente, una persona de la cual siempre aprendes algo, de las que te inspira y te da fuerzas para seguir adelante. En mi hay muchas cosas de él, sobretodo en la vida fuera del baloncesto, dentro de esta, puedo decir que heredé la perseverancia y el perfeccionismo, el querer hacer las cosas bien. Además, todo el mundo que conoció a mi padre sabía que era muy competitivo, competitividad que a mi también me define. Mi padre amaba este deporte, intentando transmitirlo a sus jugadores y jugadores, y es lo que intento transmitir yo jugando, ya que siempre tengo una sonrisa en la cara, hecho que aprendí de él.

Desde hace ya dos temporadas, el RACA Granada disfruta de nuestros #11 (ahora #1) y #19 favoritos. ¿Es por eso que seguís jugando al baloncesto, aun estando lejos de casa?

I: Si es por eso que continuo jugando al baloncesto ya que desde muy pequeñita ha sido parte de mi vida y por mucho que ésta cambie no quiero que el baloncesto desaparezca de ella. El baloncesto me ayuda mucho a evadirme y poder dejar de pensar durante dos horas, además mi padre al llegar aquí nos dijo que el baloncesto nos ayudaría a adaptarnos y conocer a gente, que razón tenía, ya que gracias al Raca hemos conocido a persona geniales que son nuestro apoyo en Granada.

L: La verdad que si mi padre no me hubiese enseñado tanto del baloncesto no sabría decirte si a día de hoy seguiría. Le agradezco que desde pequeñita me introdujera en este mundo ya que a día de hoy no podría vivir sin él. Este deporte siempre me ha ayudado mucho a ser mejor persona, pero sobretodo a superar muchas adversidades que se han cruzado en mi vida. Además, creo que es un deporte que ayuda mucho a crear vínculos y a hacer unas grandes amistades para toda la vida.

¿En qué os ha ayudado vuestro imborrable paso por el CD Alcázar para adaptaros a una ciudad grande como Granada (comparada con Mahón)? ¿Y a su baloncesto/competición?

L: La verdad que gracias al CD Alcázar he podido desarrollarme como persona y tener una mayor autonomía, gracias a todos los viajes que hicimos. Además, me ha ayudado a ver un mundo que me gusta mucho y es el de ser entrenadora de niños pequeños y ver como disfrutan tanto de un deporte al que tú amas. En cuanto a la competición es verdad que la de Andalucía es muy diferente ya que es mucho más intensa y gracias a la experiencia vivida en el Alcázar me ha ayudado a ser una persona tranquila jugando y no rendirme nunca pese a las dificultades del juego.

I: Personalmente, a mi me ha ayudado a ser más independiente por el hecho de viajar un montón sin mis padres, así bien, el hecho de no rendirme ante los inconvenientes que puedan suceder en mi vida. En cuanto a la competición, la competición andaluza es mucho más intensa por tanto, de mi experiencia en la competición de Menorca saco el hecho de jugar duro y no adaptarme al juego del rival.

¿Cómo es un día en la vida de “las Perelló”? ¿Tenéis espacio para disfrutar de vosotras?

I: Un día mío empieza por ir a la universidad 4h por la mañana y 2h por la tarde, al llegar a caso hago la comida con mi hermana, me pongo a descansar y luego a estudiar. Al final del día, normalmente termina o yendo a entrenar o cenando en el salón con Llum y Laia hablando y riendo sobre nuestras cosas.

Siempre intento sacar espacio para mí, aunque sea un rato por la tarde antes de ponerme a estudiar o después de la ducha, porque creo que es importante para y estar con uno mismo, aunque a veces no tengo mucho tiempo, siempre sacó cosas positivas de ese ratito.

L: Un día mío empieza yendo a la universidad durante la mañana, llegar a casa y comer con Irene y mi compañera de piso Llum. Al terminar siempre suelo descansar un rato y luego ponerme a estudiar. Hay tres días a la semana que tengo entreno con mi equipo de baloncesto y al terminar siempre suelo ponerme otra vez con la universidad. A la noche, siempre suelo cenar con Llum e Irene pero hay tres días donde me voy a entrenar con el equipo en el que juego. A día de hoy si tengo bastante espacio para disfrutar de mí misma, es verdad que tanto la universidad como los entrenos de mis pequeños me quitan muchas horas de trabajo, pero siempre se puede encontrar un ratito al día para hacer otras cosas.

Nuestro objetivo es sumar todas vuestras curiosidades/historias/trayectorias. Si eres ex-jugador del CD Alcázar, y estás interesado en hacernos llegar tus estadísticas, tus fotos, etc., escríbenos un WApp al 639835601, o un correo electrónico a info@esencialproyectos.com.